La flauta dulce es un instrumento musical de viento que pertenece a la familia de las flautas. Se le llama «dulce» debido a su tono suave y melodioso. Es un instrumento de viento que se toca soplando aire a través de una serie de agujeros en el tubo de la flauta, similar a otros instrumentos de viento como la flauta traversa, la clarinete o el saxofón.
La flauta dulce es conocida por su sonido suave y agradable, y es un instrumento popular en la enseñanza de la música en las escuelas debido a su relativa facilidad de aprendizaje, especialmente para los niños. A menudo se utiliza en la interpretación de música barroca y renacentista, aunque también se encuentra en una variedad de estilos musicales, desde música clásica hasta música folk y contemporánea.
Este instrumento consta de un tubo largo con una serie de agujeros, y para producir diferentes notas, el intérprete tapa o destapa los agujeros con los dedos de ambas manos. Existen varios tamaños y tipos de flautas dulces, como la soprano, alto, tenor y bajo, cada una con su propio rango de notas y timbre característico.
La flauta dulce ha sido utilizada durante siglos en la música de diferentes culturas y continúa siendo un instrumento apreciado tanto por principiantes como por músicos experimentados.
Origen de la Flauta Dulce
La flauta dulce tiene una larga historia que se remonta a la antigüedad. Se cree que su origen se encuentra en instrumentos de viento similares que se utilizaron en varias culturas de todo el mundo a lo largo de los siglos. Aunque es difícil determinar un origen exacto, aquí hay algunas notas sobre su evolución:
1. Antigüedad: Instrumentos de viento similares a la flauta dulce se han encontrado en excavaciones arqueológicas en diferentes partes del mundo. Por ejemplo, se han descubierto flautas de hueso en antiguas civilizaciones chinas y egipcias que datan de miles de años atrás.
2. Edad Media: Durante la Edad Media, la flauta dulce como la conocemos hoy comenzó a desarrollarse en Europa. Fue ampliamente utilizada en la música de esa época y se fabricaba en varios tamaños para abarcar un rango más amplio de notas.
3. Renacimiento y Barroco: La flauta dulce experimentó un auge en popularidad durante el Renacimiento y el Barroco. En esta época, se utilizaron diferentes tipos de flautas dulces en conjuntos de música de cámara y música vocal.
4. Declive y Revival: A medida que avanzaba el período barroco, la flauta dulce perdió parte de su prominencia frente a otros instrumentos de viento, como la flauta traversa. Sin embargo, en el siglo XX, experimentó un renacimiento en la música antigua y la enseñanza musical, especialmente en el contexto educativo, como un instrumento accesible para principiantes.
La flauta dulce es conocida por su tono suave y melódico, lo que la hace especialmente adecuada para la interpretación de música renacentista y barroca. A lo largo de su historia, ha evolucionado en términos de diseño y afinación, y hoy en día, se encuentra en diversos tamaños y afinaciones para abarcar una gama más amplia de repertorio musical. A pesar de los altibajos en su popularidad a lo largo de los siglos, la flauta dulce ha perdurado y sigue siendo un instrumento apreciado en la música y la educación musical en la actualidad..
Cuidados, limpieza y mantenimiento básico de la flauta dulce (para flautas de madera)
Temperatura idónea de la flauta
La flauta se debe empezar a tocar muy poco tiempo al principio, aumentando paulatinamente su tiempo de tocado. Transcurrido un mes o algo más, se podrá tocar la flauta ya como una hora seguida, antes de este tiempo no es recomendable.
10′ cada día durante la primera semana, 20′ en la segunda, 30′ en la tercera, etc.
Es recomendable empezar a tocar la flauta durante unos solos segundos en la primera semana (10 segundos), aumentando a 20 segundos ya en la siguiente semana, 30 segundos en la tercera….
Este procedimiento se recomienda para que la madera de la flauta se vaya estabilizando y amoldando a la humedad que se produce con el soplido para tocar la flauta.
Evitar los cambios bruscos de humedad y temperatura en la flauta
Hay que tener mucho cuidado a la hora de tocar la flauta en ambientes muy fríos, alrededor de los 10ºC. En estos casos, hay que ir calentando la flauta poco a poco, de lo contrario puede rajarse por el cambio brusco de frío a caliente por el aire del soplo del flautista.
Hay que calentar la flauta durante aproximadamente unos 5 minutos antes de empezar a tocarla. Sobre todo hay que calentar la cabeza de la flauta, se puede hacer con las manos, poniéndola debajo del brazo…
Desmontar la flauta y limpiarla por dentro
Dejar la flauta sin desmontar después de tocar puede provocar hongos y deformar las juntas del cuerpo. Puede provocar dilataciones y rajar o deformar las distintas piezas de la flauta ya que con la humedad, el hilo y las propias juntas puede hincharse. Por otro lado, dejar la flauta montada puede atascar fuertemente cualquier parte hasta el punto de no poder desmontarla (más de una vez me he encontrado la fontanella o la cápusla de una bajo sin poder desmontar y tener que esperar meses hasta desaparecer totalmente la humedad y poder desmontarlas sin forzar ni arriesgar cualquier accidente).
Siempre que terminamos de tocar la flauta, hay que desmontarla y limpiarla inmediatamente. Si no se hace, pueden salir hongos y se pueden deformar las juntas de la flauta. Pueden aparecer dilataciones y deformar las distintas partes de la flauta. Si no se desmonta la flauta al terminar de tocar, pude hacer que las piezas que van encajadas se atasquen y luego no poder desmontar la flauta.
Dejar secar la flauta una vez limpiada hasta que se seque totalmente
Igual que en el caso anterior, la humedad que pueda quedar en el interior de la flauta puede provocar hongos, que ya sabemos que son malos para nuestra salud y además son muy difíciles de eliminar de dentro de la flauta. También hay que recordar que la limpieza y secado de la flauta influyen enormemente en la calidad del sonido producido. Muy importante también limpiar los agujeros de la flauta, algo que se suele pasar por alto en muchas ocasiones. Utilizando bastoncillos humedecidos con aceite.
Aceitado de la flauta
– Durante el primer mes, se deberá hacer una vez por semana.
– Transcurrido este primer mes, aceitarla una vez al mes durante 6 meses.
– Una vez pasados estos 6 meses, aceitar la flauta 3-4 veces al año.
Se aceitará siempre con aceite de linaza crudo.
Las flautas de madera de boj deberán reposar en vertical durante unas cuantas horas, sobre todo los cuerpos de flautas de una pieza.
En las flautas renacentistas, el agujero nueve va tapado con cera de abeja. Por lo tanto hay que tener mucho cuidado, cualquier golpe podría variar la estanqueidad de la flauta haciendo que las notas no suenen como deben sonar.
La flauta deberá ser enviada al constructor después de un año (como tarde) para su revisión (revoicing), así como en el momento en el que se observe que la flauta deje de sonar normalmente o presente cualquier tipo de problema.
Hay que llevar una vez al año la flauta para su revisión. Si en algún momento antes del año se observara cualquier deficiencia tanto física como sonora, hay que llevarla de inmediato para su cuidado.
Aspectos a tener en cuenta con el aceite
El objetivo del aceite es hacer impermeable el interior de la flauta, para que así la flauta este libre de humedades y el aire pueda circular por el interior con facilidad.
Se recomienda no echar aceite a la flauta en verano, la madera se podría rajar al contacto con el aceite debido al calor.
La diferencia en cuanto a sonoridad se refiere, es abismal con una flauta aceitada y otra sin aceitar
Hay personas que reaccionan con alergia a algunos aceites (leves picores de piel). Si el aceite de linaza (biológico 1ª presión en frío, aceite de lino, en herbolarios) lo produjera se podrían usar otros tipos de aceite como el de sésamo, cacahuete, almendras dulces, oliva…
Ojo con las alergias, hay algunas personas que son alérgicas a algunos de los aceites que se suelen emplear en la limpieza de las flautas. Si eres alérgico al aceite de linaza o aceite de lino, recomendamos usar otros aceites como el de sésamo, cacahuete, almendras…
Conclusión
Para concluir, sobre el aceite nadie termina de ponerse de acuerdo y al final resulta muy personal. Cada constructor y cada flautista termina por hacerlo de maneras muy diferentes y con distintos aceites, barnices, etc…
Es una decisión personal el uso de un tipo de aceite u otro. Cada fabricante de flautas y cada músico, deciden limpiar y mantener su flauta de muy diversas formas, siendo cada una buena siempre que la flauta no pierde su capacidad musical y suene como el primer día.